Especialistas destacan que una alimentación equilibrada puede mejorar la apariencia de la piel sin recurrir a tratamientos costosos.

18 de diciembre de 2025.- Mantener una piel joven, tersa y luminosa no depende únicamente de cremas o tratamientos estéticos, sino de una alimentación adecuada. De acuerdo con recomendaciones de la Academia Española de Nutrición y Dietética, ciertos alimentos pueden contribuir de manera significativa a mejorar la salud y apariencia de la piel desde el interior.

Especialistas señalan que el deterioro cutáneo no está ligado exclusivamente a la edad, sino también a factores como el estilo de vida y los hábitos alimenticios. Una dieta deficiente puede favorecer la resequedad, flacidez y aparición de marcas, mientras que una alimentación balanceada aporta nutrientes esenciales para la regeneración celular y la producción de colágeno.

Entre los 10 alimentos recomendados por expertos para favorecer el rejuvenecimiento de la piel se encuentran el aguacate; pescados y mariscos como salmón, caballa, sardinas y atún; frutos secos como almendras, nueces y arándanos; chocolate con alto porcentaje de cacao; aceite de oliva virgen o extra virgen; legumbres como frijoles, lentejas y garbanzos; semillas oleaginosas y sus aceites, entre ellos cacahuate, soya, canola, girasol, lino y ajonjolí; tés como el verde, frutales y de hierbas; hortalizas y frutas como manzana, fresa y frambuesa; así como especias como cúrcuma, albahaca, pimienta negra, manzanilla y azafrán.

Los expertos subrayan que no basta con consumir estos alimentos de forma aislada, sino que su correcta preparación, combinación y moderación son clave. Pueden integrarse en ensaladas, sopas, postres o como snacks saludables, siempre acompañados de actividad física y un consumo adecuado de grasas saludables.

Además, advierten que existen hábitos cotidianos que aceleran el envejecimiento de la piel, como no usar protector solar, fumar y consumir alcohol en exceso, dormir poco o mal, ingerir grandes cantidades de azúcares y productos ultra procesados, así como el uso excesivo de productos cosméticos inadecuados.

Finalmente, especialistas recomiendan adoptar un enfoque integral para el cuidado de la piel, que combine una dieta saludable, hidratación adecuada y la eliminación de prácticas nocivas, a fin de preservar la salud general y una apariencia más joven y cuidada

Frescura, dulzura y estilo: el giro inesperado que está redefiniendo el perfume masculino este año

Ciudad de México; a 16 de diciembre del 2025.— En 2025, los hombres ya no solo huelen a madera, cuero o especias intensas. El nuevo protagonista del mundo de la perfumería masculina tiene aroma a frutas. Aunque para muchos puede parecer una sorpresa, los perfumes frutales se han colocado como una de las tendencias más fuertes del año, rompiendo estereotipos y ganando terreno por su frescura y versatilidad.

Expertos en fragancias explican que los aromas frutales funcionan como un “gancho olfativo”: son las primeras notas que se perciben al aplicar un perfume. Manzana, piña, higo, melón o mandarina suelen aparecer como notas de salida, ofreciendo una sensación fresca, ligera y dulce que resulta agradable para casi cualquier persona.

Un dato curioso es que, aunque los cítricos tienen su propia clasificación, en la práctica también se consideran parte de esta tendencia. Bergamota, toronja o mandarina comparten ese efecto refrescante que define a los perfumes frutales y que los vuelve ideales para el uso diario, especialmente en temporadas de calor.

Entre las fragancias que ejemplifican esta moda se encuentra Figuier Eden, de Giorgio Armani, donde el higo se combina con bergamota y mandarina para crear un aroma elegante y moderno, demostrando que lo frutal también puede ser sofisticado.

Otra referencia es Agua de Loewe Él, una mezcla intensa de piña, manzana y pomelo que, lejos de saturar, se equilibra con notas acuáticas y maderas, logrando un perfume masculino, fresco y sensual.

Por su parte, Polo Blue, de Ralph Lauren, confirma por qué esta familia aromática es tan popular: pepino, melón y mandarina construyen una fragancia limpia, juvenil y fácil de llevar, pensada para gustar a todos.

Así, entre frutas, cítricos y acordes acuáticos, los perfumes frutales se consolidan como la nueva normalidad en 2025. Una tendencia que demuestra que el aroma masculino también puede ser fresco, divertido y sorprendente, sin perder carácter.

Tradiciones previas al 25 de diciembre preparan el ambiente festivo y refuerzan valores de unión, reflexión y convivencia familiar

13 de diciembre de 2025.— Para muchas culturas, la Navidad no comienza el 24 o el 25 de diciembre, sino semanas antes, a través de una serie de prácticas que anuncian la llegada de la temporada y fortalecen la convivencia familiar y comunitaria.

Estas tradiciones, transmitidas de generación en generación, forman parte del patrimonio cultural de distintos países y, aunque presentan variaciones regionales, coinciden en promover valores como la unión, la gratitud y la esperanza.

Una de las costumbres más comunes es el armado del árbol de Navidad y la colocación del nacimiento. A finales de noviembre o durante los primeros días de diciembre, familias y comunidades decoran sus hogares y espacios públicos con luces y adornos. En el caso del nacimiento, es habitual que el Niño Dios se coloque la noche del 24 de diciembre, marcando simbólicamente el inicio de la Navidad.

El Adviento también ocupa un lugar relevante en hogares de tradición cristiana. La corona de Adviento, elaborada con ramas verdes y velas, se utiliza durante los cuatro domingos previos a la Navidad, encendiendo una vela por semana como símbolo de esperanza, amor, alegría y paz. A esta práctica se suman los calendarios de Adviento, que refuerzan la expectativa y la reflexión diaria.

En México, las posadas destacan como una de las expresiones más representativas del periodo decembrino. Celebradas del 16 al 24 de diciembre, recrean el peregrinaje de José y María, e incluyen cantos, piñatas, alimentos tradicionales y bebidas calientes. Con el tiempo, estas celebraciones se han consolidado como espacios de encuentro vecinal y familiar.

La preparación de los platillos navideños es otra tradición que se desarrolla con anticipación. Durante las semanas previas, muchas familias comienzan la elaboración de recetas típicas, convirtiendo la cocina en un punto de reunión donde se comparten saberes y se preservan herencias culinarias.

También es común la escritura de cartas y la preparación de regalos simbólicos. Aunque las tecnologías han modificado esta práctica, persiste el hábito de expresar buenos deseos por escrito y elegir obsequios con intención y significado.

La música y los villancicos acompañan gran parte del ambiente previo a la Navidad. Conciertos, coros, pastorelas y festivales escolares se realizan en comunidades, escuelas e iglesias, reforzando la identidad cultural y el sentido de pertenencia.

Finalmente, la limpieza y renovación del hogar simboliza el cierre de ciclos y la preparación para recibir lo nuevo. Muchas familias aprovechan esta etapa para ordenar sus espacios y donar objetos en buen estado, fortaleciendo valores de solidaridad y renovación.

Cada diciembre, estas tradiciones reafirman que la Navidad es un proceso que se construye día a día y que su esencia va más allá de una sola fecha.