El encuentro entre la estrella internacional y el joven cantante colombiano desató reacciones en redes y rumores de colaboración musical.

Barranquilla, Colombia, 25 de septiembre de 2025.– La música y la tradición se unieron en un momento inesperado que rápidamente se volvió tendencia. Shakira y Beéle protagonizaron un video bailando “Currucuchu”, de la Niña Emilia, tema considerado un himno del Carnaval de Barranquilla y del Caribe colombiano, lo que generó una oleada de reacciones en redes sociales y rumores sobre una posible colaboración entre ambos artistas.

La grabación, publicada el 24 de septiembre en plataformas como TikTok e Instagram, muestra a la barranquillera y a Brandon de Jesús López Orozco, nombre real de Beéle, interpretando y bailando con entusiasmo la reconocida cumbia en un ambiente festivo. El gesto fue celebrado por miles de seguidores, quienes destacaron el orgullo de sus raíces y la unión de dos generaciones de la música colombiana.

“Qué hermosa esa canción”, “al ritmo del carnaval” y “solo los de la costa sabemos lo que significa esta hermosura” fueron algunos de los mensajes que inundaron las redes. En pocas horas, el clip alcanzó millones de visualizaciones, reforzando el impacto cultural de la pieza musical.

La presencia de Shakira, ícono global del pop latino, junto al joven exponente de la música urbana, también marcó un respiro en la carrera de Beéle, quien recientemente había enfrentado polémicas tras la filtración de un video íntimo con su expareja, Isabella Ladera, situación que lo mantuvo en el foco mediático por razones ajenas a lo artístico.

Sin embargo, la interacción con Shakira devolvió la atención al terreno musical. El hecho de que la grabación se realizara en un estudio alimentó especulaciones sobre una colaboración en marcha, aunque hasta ahora ninguno de los dos artistas ha confirmado esa posibilidad.

No obstante, el entusiasmo no fue unánime. Entre los miles de comentarios también aparecieron críticas y cuestionamientos hacia la decisión de Shakira de compartir escena con Beéle. “Shakira, mi amor, pero tú odias a los infieles, ¿qué pasó corazón?”, “prefiero pensar que esto es IA” y “quedé ciega, sorda y muda” fueron algunas de las reacciones irónicas de los internautas.

El encuentro entre ambas figuras no solo revitalizó la conversación en torno a la música de Beéle, sino que también puso en el centro a “Currucuchu”, reafirmando su vigencia como símbolo del folclore caribeño y recordando que, más allá de polémicas, la música sigue siendo un punto de unión y orgullo cultural para Colombia.

El actor se volvió tendencia en redes tras protagonizar un momento inesperado en la última gala de nominación rumbo a la gran final.

Ciudad de México, 25 de septiembre de 2025.– La tensión de la última gala de nominación en La Casa de los Famosos México se transformó en sorpresa y risas cuando el actor Alexis Ayala decidió besar en la boca a todos sus compañeros dentro del reality, gesto que rápidamente lo convirtió en tendencia en redes sociales.

La noche comenzó con dramatismo, ya que todos los participantes, a excepción de Mar Contreras quien ya tiene asegurado su lugar en la gran final, subieron al panel de nominados. El ambiente estaba cargado de nerviosismo, pero tras la cena de nominados, un episodio inesperado cambió el tono de la velada.

De manera espontánea, Alexis Ayala se acercó a Shiky y le dio un beso en la boca frente a Aldo de Nigris, quien reaccionó sorprendido ante la escena. Las risas no se hicieron esperar y, al notar la reacción del resto, el actor decidió repetir el gesto con Aarón, Abelito y el propio Aldo.

“Lo único que me dio miedo es que se nos atoraran los bigotes”, bromeó el actor, provocando aún más carcajadas entre sus compañeros.

Ayala explicó después el significado de su acción: “Es un beso de hombres, de amigos, es un beso de amor, de vida, sin sexo, es un beso con amor, eso es lo importante… Y les di un beso a los 4, honesto, sincero, con amor… con ganas de que se rieran, me riera. Me lo voy a guardar hasta la vida”.

El inesperado gesto dividió opiniones entre los televidentes y generó un aluvión de comentarios en redes, donde algunos celebraron el humor y la espontaneidad de Ayala, mientras que otros lo calificaron como uno de los momentos más memorables de la temporada.

Con la gran final cada vez más cerca, lo ocurrido demuestra que en La Casa de los Famosos México las sorpresas siguen siendo parte del juego y que la convivencia puede dar giros que trascienden lo esperado.

Aldo, Abelito, Alexis y Aarón quedaron fuera de la posibilidad de llegar a la final.

Ciudad de México, 25 de septiembre de 2025.– La contienda por un lugar en la gran final dio un giro inesperado luego de que Shiky sorprendiera con una estrategia que dejó fuera de la jugada a cuatro de sus más fuertes rivales: Aldo, Abelito, Alexis y Aarón. La movida, descrita por muchos como una auténtica “jugada maestra”, no solo aseguró la permanencia de Shiky en la recta decisiva, sino que también cambió el panorama de la competencia.

El momento fue clave. Cuando parecía que el rumbo estaba definido, Shiky ejecutó una maniobra calculada que tomó por sorpresa tanto a los participantes como al público. La eliminación de Aldo, Abelito, Alexis y Aarón generó reacciones inmediatas en redes sociales, donde los seguidores debatieron entre quienes aplauden la astucia del competidor y quienes lamentan la salida de sus favoritos.

Analistas del programa y fanáticos coinciden en que la estrategia de Shiky marca un antes y un después en esta edición. “Fue arriesgado, pero efectivo”, señalaron algunos comentaristas, subrayando que este tipo de movimientos son los que mantienen viva la emoción del certamen.

Con cuatro nombres importantes fuera de la contienda, el escenario rumbo a la gran final luce más impredecible que nunca. La presión aumenta, las alianzas se tambalean y la expectativa del público crece ante lo que podría ser una de las finales más intensas de los últimos años.

Ahora, todas las miradas están puestas en Shiky, quien no solo se ha ganado un lugar en la fase decisiva, sino también el reconocimiento de haber cambiado las reglas del juego con una sola jugada.